Los perros y los gatos son las mascotas preferidas para la mayoría de nosotros. Sin embargo, son animales muy diferentes y su convivencia muchas veces puede ser complicada.
En este artículo voy a intentar explicarte algunos consejos para intentar que esta convivencia entre perros y gatos sea más fácil. Además, si ya tienes un perro o un gato en casa, te ayudaremos para que la llegada de una nueva mascota sea más fácil.
10 consejos para una mejor convivencia
- Conoce a tus mascotas: siempre es importante conocer cómo es el estilo de vida de cada animal. Por lo general, los perros son muy sociables lo cual nos ayudará a su adiestramiento mientras que los gatos son animales más independientes. Por otro lado, los perros deben salir a pasear y hacer ejercicio todos los días y los gatos necesitan menos espacio y actividad.
- Planificación: la adaptación entre ellos será mucho más fácil si se conocen desde cachorros. Si por el contrario no se conocen desde pequeños tendremos que adaptar espacios en la casa. Necesitaremos que el gato tenga una zona donde pueda sentirse seguro sabiendo que no puede estar nuestro perro. Por otro lado, tendremos que tener comederos, bebederos y accesorios para cada uno individuales y que sepan cuál es de cada uno.
- Primeros encuentros: deben realizarse con mucho cuidado y delicadeza. Es recomendable que en los primeros encuentros el perro esté atado y a una cierta distancia del gato. Así podremos ver cómo reacciona cada uno y poco a poco ir acercándolos. Esto nos puede llevar un tiempo pero lo mejor es no tener prisa.
- Olfato: el intercambio de olores es importante para que se vayan conociendo. Los primeros días puedes dejar al gato algún juguete del perro y viceversa para que vayan conociendo sus olores.
- Nuestra adaptación: debemos dejar que la relación se desarrolle de la forma más natural posible, sólo actuando cuando sea necesario.
- Expectativas realistas: debemos saber que la relación no se creará de la noche a la mañana. Puede que les lleve su tiempo conocerse y tolerarse. Habrá ocaciones que la relación sea más cercana entre ellos y otras en las que sea una relación más distante.
- Salud e higiene: antes de entrar en contacto es recomendable que ambos estén limpios y sanos además de estar al día de sus desparasitaciones.
- Limpieza: deberemos establecer una rutina de limpieza de los animales así como de sus juguetes, accesorios, camas, comederos, bebederos y del arenero del gato. Siempre conviene que el arenero no esté al alcance del perro para que el gato se sienta el lugar donde esté como una zona segura.
- Alimentación: además de tener comederos y bebederos individuales, tendremos que seguir los hábitos alimenticios de cada uno. Por otro lado, tendremos que evitar que el perro se coma la comida del gato.
- Casos especiales: en casos en los que ya tengamos un perro y un gato con problemas de convivencia es muy difícil aconsejarte sin conocer todos los detalles. En este caso te recomendamos acudir a nuestra clínica veterinaria en Torrevieja, nuestra clínica veterinaria en San Miguel de Salinas o a nuestra clínica veterinaria en La Zenia (Orihuela Costa) y mis compañeros te ayudarán a mejorar su convivencia.
¡Buena suerte en esta fantástica aventura!
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